Cinco mitos comunes sobre el reciclaje en casa y muestra cómo la ciencia de materiales permite transformar residuos complejos en soluciones sostenibles que facilitan la separación, recuperación y reutilización desde el hogar.
En Colombia se generan más de 1,4 millones de toneladas de residuos plásticos cada año, pero solo el 11 % logra ser reciclado de manera efectiva, según Acoplásticos. Frente a este panorama, la tecnología se consolida como un aliado indispensable. Frente a esta realidad, la ciencia de materiales y la innovación tecnológica están transformando la manera en que reciclamos desde casa.
Gracias a nuevos desarrollos, es posible diseñar empaques reciclables desde su origen, procesar residuos con menor esfuerzo del consumidor y extender la vida útil de los materiales. Estos avances no solo facilitan la separación y recuperación de residuos, sino que hacen que el reciclaje sea más accesible y eficiente para todos.
En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente —cuyo eje central este año es la lucha contra la contaminación por plásticos— Dow, líder mundial en ciencia de materiales, desmiente cinco mitos comunes sobre el reciclaje de plásticos en casa:
- Mito: para reciclar plástico, hay que lavar todo perfectamente
Falso. No es necesario dejar los empaques impecables, pero sí remover residuos visibles de alimentos o líquidos. En muchos casos, un enjuague rápido es suficiente. Las tecnologías actuales permiten procesar materiales con cierto grado de residuo superficial, sin que eso impida su reciclaje. Además, hoy existen resinas diseñadas para facilitar este proceso, haciendo más eficiente la transformación de residuos en nuevos productos.
- Mito: los empaques de alimentos no se pueden reciclar
Falso. Aunque tradicionalmente muchos empaques de alimentos han sido difíciles de reciclar por estar compuestos por múltiples capas, hoy existen alternativas diseñadas desde su origen para facilitar ese proceso, eliminando el uso de estructuras metalizadas. En Colombia ya se han desarrollado empaques reciclables para diferentes productos como café, alimentos para mascotas, productos congelados, chocolates, entre otros. Estas soluciones han sido creadas por Dow en alianza con convertidores como Coldeplast y Alico, y demuestran que es posible combinar funcionalidad, conservación del producto y circularidad en un mismo empaque. - Mito: la ciencia no tiene nada que ver con los residuos domésticos
Falso. Sin ciencia de materiales, no sería posible reciclar como lo hacemos hoy. Dow ha desarrollado tecnologías como REVOLOOP™, una resina posconsumo de alta calidad que permite crear nuevos empaques a partir de plásticos que ya fueron utilizados. Además, a través de su red global de Pack Studios, la compañía colabora con clientes, fabricantes y recicladores para diseñar productos más fáciles de reutilizar y reciclar desde su concepción. - Mito: separar residuos no sirve si todo termina en el mismo camión
Falso. El reciclaje funciona cuando toda la cadena actúa de forma articulada. Separar correctamente en el hogar es fundamental para que el material tenga valor en los centros de acopio y pueda reincorporarse en nuevas cadenas productivas. Dow promueve modelos de reciclaje y desarrolla tecnologías que permiten recuperar incluso plásticos antes considerados no reciclables. Esto amplía el rango de materiales aprovechables y fortalece el trabajo de recicladores en todo el país. - Mito: el plástico es el enemigo
Falso. El problema no es el material, sino como lo clasificamos y lo que hacemos con él. Los plásticos son livianos, duraderos y esenciales para aplicaciones como alimentos, salud e infraestructura. La clave está en cómo se diseñan, cómo se usan y cómo se gestionan después de su vida útil.
Hay que tener en cuenta que no todo reciclaje es útil. Si bien separar residuos siempre es mejor que dejarlos en las calles o ríos, es la ciencia de materiales la que permite que esos residuos realmente puedan ser reutilizados.