Según la medición de clima de inversión realizada por la Andi, el panorama económico para el próximo año es altamente incierto para cerca del 70% de los encuestados.
En tan sólo 2.1 se estima que crecerá la economía nacional en 2023. Esta cifra, resultado de la Encuesta de Opinión Financiera (EOF) de Fedesarrollo es el reflejo de la opinión de los empresarios colombianos que se preparan desde ya para una gran recesión en el año entrante.
Según Juan Carlos Arbeláez, Socio de Impuestos & Servicios Legales de Crowe Colombia, en su informe Perspectiva de la economía mundial: Entorno macroeconómico 2022, “el momento para Colombia es crítico, pues aparte de los movimientos políticos que ya tiene en marcha el gobierno, las presiones inflacionarias globales han jugado un papel determinante en el deterioro de nuestra economía. Así mismo, con el aumento de las tasas de interés y el deterioro de las expectativas de crecimiento no les queda otra cosa que hacer a las empresas que prepararse con una planeación estratégica que las puede salvar”.
Pero, ¿y qué acciones tomar?: en concepto del experto de Crowe, firma de servicios profesionales que ofrece auditoría, asesoramiento legal y fiscal a las empresas, “tras la pandemia, muchas organizaciones entendieron la importancia de flexibilizar sus planes y tomar decisiones rápidas, informadas y concretas. Es por esto que frente al futuro próximo es importante enfocarse, analizar y aprovechar las ranuras de las nuevas reglas en materias tributaria, macroeconómica y laboral”.
En este contexto, Arbeláez aconseja a los empresarios pensar con cabeza fría y concentrarse en estrategias macro como estas, que serán fundamentales a la hora de enfrentar la nueva realidad económico que se viene:
1 Prestar especial atención a los mensajes de los mercados.
2 Trabajar en estrategias encaminadas a la optimización de sus cadenas de producción.
3 Concretar sus planes de transformación digital en busca de eficiencias financieras.
4 Establecer planes de reorganización en materia administrativa, financiera y tributaria.
5 Hacer uso positivo de la diferencia en el tema cambiario con el fin de abrirse a nuevos mercados.
Ahora, aunque estas estrategias son genéricas y pueden apalancar el crecimiento de muchos negocios, a nivel macro, “algunos sectores como el agroindustrial y el energético tendrán las de ganar, e incluso podrán generar ingresos que mengüen la crisis.
“Así mismo el sector de la tecnología y el de servicios tendrán que aprovechar porque seguramente se verán enfrentados a un ambiente favorable, o al menos estable, al igual que el turismo, que con la devaluación del peso, ha convertido a Colombia en un país atractivo para los viajeros del mundo”, afirma el experto.
En la otra orilla, están las empresas de los sectores que pueden sufrir un decrecimiento, o un estancamiento como es el caso de los hidrocarburos, el carbón, el hierro, y en general la minería, los cuales se enfrentan a los riesgos de los cambios regulatorios que siguen en marcha, y que los ubican en el peor panorama de la incertidumbre.