El MinTIC registró 36.000 millones de ataques en 2024. Una nueva tecnología detiene el fraude móvil en tiempo real y devuelve la confianza a usuarios y desarrolladores.
La ciberseguridad es una necesidad latente de todos los mercados, que cada vez operan más de manera digital y fortalecen los canales transaccionales virtuales. Basta ver a Bre-B, la iniciativa del Banco de la República que pretende conectar a los colombianos sin importar su entidad bancaria. Sin embargo, Colombia aún es un país vulnerable ante las amenazas de los ciberdelincuentes: según el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), tan sólo en 2024 el país fue víctima de 36.000 millones de ataques, siendo el segundo de América Latina que más estuvo expuesto a esta amenaza.
Los ataques a Colombia representaron el 17% del total que experimentó la región y preocupa a las autoridades que la verificación de identidad en entornos móviles está atravesando una crisis silenciosa. Aunque en 2024 se invirtieron más de 40 mil millones de dólares en soluciones de identidad digital, y se esperan otros 7 mil millones para este año (según Precedence Research), las técnicas de fraude digital siguen avanzando. Deepfakes, apropiaciones de cuentas y otras amenazas están superando los sistemas tradicionales sin ser detectadas.
Y es que el problema es estructural: la mayoría de las plataformas solo verifican la identidad del usuario una vez, al iniciar sesión, sin seguir inspeccionando el entorno. Esto deja la puerta abierta a fraudes durante el resto de la sesión, sin que las aplicaciones lo noten.
Frente a este panorama, la plataforma de ciberseguridad Appdome presenta una solución disruptiva: una protección de identidad del cliente (CIP) a la que ha bautizado IDAnchor. Esta es una tecnología que permite verificar, de forma continua y en tiempo real, la autenticidad del usuario, del dispositivo, de la app y de la instalación. Esto es disruptivo pues, según Chris Roeckl, Chief Product Officer de Appdome, los sistemas biométricos y de identidad no se diseñaron pensando en los retos actuales de la protección móvil. “En un mundo donde la confianza digital lo es todo, las marcas necesitan soluciones que garanticen la integridad de la identidad de principio a fin», concluye Roeckl.
¿Cómo funciona IDAnchor?
Appdome vincula cada identidad a identificadores inmutables, (es decir que no pueden ser alterados) que persisten incluso tras reinicios o reinstalaciones, y los valida con inteligencia de amenazas en tiempo real. Esto permite a las aplicaciones detectar señales de fraude desde el primer toque: inicios de sesión desde dispositivos manipulados, instalaciones no autorizadas, identidades falsas o robadas y mucho más.
A diferencia de las tecnologías tradicionales, esta solución puede mantener una cadena de confianza sólida y continua, resistente a manipulaciones, restablecimientos del dispositivo y técnicas avanzadas de evasión.
Prevención proactiva frente a un riesgo creciente
La vulnerabilidad a la que está sujeta esta industria impulsó a que El Gobierno Nacional presentara la Estrategia Nacional de Seguridad Digital 2025-2027, una hoja de ruta que busca consolidar un entorno digital más seguro, confiable y resiliente, con énfasis en la protección de los derechos, la dignidad humana y el desarrollo integral de las personas. Y es que las pérdidas por fraude móvil podrían superar los 50 mil millones de dólares en 2027 a nivel global.
Debido a esto, Appdome busca cerrar la gran brecha que han dejado las soluciones convencionales: la incapacidad de validar que quien afirma una identidad realmente es quien dice ser, y que opera en un entorno seguro.
Esta propuesta permite a cualquier aplicación –no solo a Apple o Google– emitir alertas tipo “¿Eres tú?” cuando se detectan comportamientos anómalos o entornos sospechosos. Incluso los fraudes en procesos de registro, donde atacantes crean cuentas desde dispositivos comprometidos, pueden ser identificados y neutralizados al instante.
Confianza sin fricciones
Además de la seguridad, Appdome permite a los desarrolladores mantener el control total sobre la experiencia del usuario: pueden activar autenticaciones reforzadas, solicitar validaciones o bloquear accesos, según su lógica de negocio. Roeckl asegura que el model de la compañía permite tomar decisiones inteligentes al instante, blindar a los usuarios y frenar el fraude sin fricciones.