- Solo en agosto de 2025, la demanda nacional alcanzó los 7.212,14 gigavatios/hora, un aumento del 3,83% frente al año anterior. Por esta razón, expertos advierten que es urgente que las empresas comiencen a prepararse para reducir su gasto energético y optimizar el uso de los recursos.
Ante el déficit energético que amenaza con dejar a Colombia al borde de un apagón, lanzan un ecosistema tecnológico que permite a las empresas optimizar su gasto de energía y reducir sus consumos hasta en un 35%, fortaleciendo su eficiencia operativa y sostenibilidad. Según proyecciones del operador del sistema eléctrico XM, este año el déficit de energía firme superará los 1.300 GWh, y si la situación no mejora, la brecha podría aumentar a más de 3.100 GWh para 2027, con balances negativos estimados de -1,6 % en 2025, -2 % en 2026 y hasta -3,5 % en 2027.
Esto se debe a diversos factores como los retrasos en la ejecución de nuevos proyectos de generación y transmisión, la falta de incentivos a la inversión por la incertidumbre regulatoria y el déficit creciente en el suministro de gas natural, combustible esencial para respaldar la generación térmica durante los periodos de sequía, lo que ha encendido las alarmas del sector. De mantenerse esta tendencia, el país podría enfrentar en 2027 uno de los mayores riesgos de racionamiento energético de las últimas décadas, afectando directamente la productividad industrial y la estabilidad económica.
Juan Pablo Rojas, fundador y CEO de Vértebra Soluciones, una compañía con una plataforma tecnológica especializada en gestión de servicios públicos y eficiencia energética, explica que este panorama exige que tanto el sector público como el privado adopten medidas inmediatas para reducir la demanda y optimizar el uso de los recursos energéticos disponibles. “El riesgo de apagón ya no es una posibilidad lejana, sino una consecuencia previsible si no actuamos a tiempo. Las empresas deben prepararse desde ahora para consumir de manera más inteligente, aprovechar la tecnología y hacer de la eficiencia una estrategia de sostenibilidad y competitividad”, afirma.
En esa línea, la compañía ha desarrollado una Solución Energética 360°, un ecosistema tecnológico que combina software, infraestructura, y consultoría especializada para optimizar los gastos energéticos de diversas empresas y reducir sus consumos hasta en un 35%. Actualmente, trabajan con más de 80 organizaciones en Colombia y acaban de abrir operaciones en diversos países de Centroamérica, las cuales han logrado un ahorro de más de 65.000 millones de pesos, evitando la emisión de 15.000 toneladas de CO₂ y optimizando el uso de más de 50 millones de kWh.
De acuerdo con el directivo de Vértebra Soluciones, para que las empresas en Colombia comiencen a reducir su consumo energético es necesario implementar una Solución 360°, que parte de la incorporación de una plataforma que centraliza la información de los servicios públicos, orientando la data a: la eficiencia, paneles solares, sensores IoT, medidores inteligentes y sistemas de climatización e iluminación optimizados, los cuales permiten medir y controlar en tiempo real el uso de la energía, e incluso de otros recursos como el agua y el gas, dentro de las compañías.
“A través de nuestra plataforma digital de monitoreo y análisis, las empresas pueden centralizar la información energética de todas sus sedes o puntos de operación, lo que facilita la detección de anomalías, la auditoría de facturas y la toma de decisiones basadas en datos reales. De esta manera, es posible identificar con precisión qué consumos energéticos pueden optimizarse y reducirse, impulsando una gestión más eficiente y sostenible”, explica Rojas.
Asimismo, destaca que al analizar de manera detallada los consumos energéticos, las empresas pueden identificar oportunidades de mejora y optimización que van más allá del ahorro en sus facturas. Con el apoyo de equipos especializados y expertos como los de Vértebra Soluciones, es posible aprovechar los incentivos tributarios vigentes, ajustar las tarifas de los servicios públicos según la operación real, incorporar estrategias de sostenibilidad y fortalecer los reportes ESG, lo que se traduce en mayor eficiencia operativa, mejor desempeño financiero y una contribución más sólida a los compromisos ambientales y sociales de cada organización.