Proteger el ingreso y los gastos de indicadores clave como la inflación es uno de los retos más importantes de 2024 para microempresarios y hogares.
Después de la temporada de Navidad y fin de año, los microempresarios colombianos ya hacen las cuentas de las múltiples alzas que trae el 2024 y buscan caminos para que sus ingresos rindan y permitan cumplir diferentes propósitos como, por ejemplo, ahorrar, invertir, pagar deudas, hacer remodelaciones, ampliar sus negocios, estudiar, entre otros.
Es cierto que factores como el aumento en el costo de vida y la desaceleración de la economía se han convertido en un desafío para millones de colombianos y, por supuesto, para los microempresarios, quienes afrontan retos como generar ingresos, aumentar ventas, generar empleo, ser resilientes ante el cambio climático, crear nuevas líneas de negocio y, por supuesto, traer bienestar para familias y comunidades que se fortalecen con el trabajo de la fuerza productiva más grande del país.
En este comienzo de 2024, expertos de Bancamía entregan a los microempresarios del país un listado de cinco consejos para lograr una buena salud financiera, organizando de forma práctica su economía durante el año en curso y, que logre proteger el patrimonio de los negocios y de las familias.
- Hacer un presupuesto detallado: es clave que los microempresarios tengan un conocimiento al detalle de sus ingresos y gastos mensuales. Elaborar un sencillo presupuesto mensual dará suficiente claridad para poder tomar el control de las finanzas y los negocios. Para hacerlo pueden seguirse estos pasos:
- Calcular el ingreso neto: es la cantidad de dinero que entra al hogar y/o negocio cada mes.
- Es recomendable hacer una lista de gastos fijos (servicios públicos, arriendo, insumos) y de gastos variables (mercado, gasolina, salarios, proveedores, entretenimiento).
- Dar seguimiento a los gastos: después de saber cuánto dinero ingresa, ya es más fácil identificar cuáles son los gastos que más pesan sobre dicho ingreso mensual.
- Organizar el pago de deudas:es clave organizar y conocer a cuánto ascienden para poder dar prioridad a su cumplimiento. Es fundamental tener hábitos de pago que faciliten una buena vida crediticia, y si se tiene claridad sobre este aspecto, la salud financiera y el avance de los propósitos de ahorro se verán beneficiados.
- Ajustar gastos para mantenerse dentro del presupuesto: teniendo cuantificado lo que ingresa y lo que se gasta, es más sencillo hacer ajustes para establecer proyectos que financien diferentes metas.
En tiempos de inflación alta como los actuales, es clave revisar hábitos de consumo del hogar, comparar precios entre comercios y buscar promociones; intentar optimizar el gasto de combustibles, agua y energía, además de generar algunas fuentes de ingresos adicionales para el hogar, como buscar diversificar el negocio o poner en marcha nuevos canales de ventas como las redes sociales.
- Revisar el presupuesto de forma regular: es importante hacer seguimiento a los gastos e ingresos para evitar sorpresas, así como tratar de contar con un fondo para imprevistos que permita reaccionar de manera rápida ante cualquier eventualidad.
- Establecer metas de ahorro: en un año como el que comienza, poder trazarse propósitos de ahorro puede parecer desafiante, pero lo más importante es tener en cuenta que para comenzar a ahorrar no se requieren grandes sumas de dinero. A partir de tener establecidos los ingresos y los gastos mensuales, el objetivo consiste en crear un hábito sostenible de ahorro que brinde estabilidad financiera y permita planear metas, además de cubrir posibles emergencias.
Es recomendable materializar las metas de ahorro de la mano de una entidad financiera vigilada para tener el dinero en un lugar seguro y evitar guardar recursos de manera informal. Además, existen opciones confiables para rentabilizar el ahorro y obtener buenas tasas de interés, incluso por encima de la inflación, como los Certificados de Depósito a Término (CDT).
- Educarse financieramente: este 2024 es una oportunidad para fortalecer los conocimientos sobre el manejo del dinero y tomar decisiones informadas que den tranquilidad financiera. Para ello existen múltiples cursos gratuitos que pueden tomarse a través de internet y, también, material didáctico. Bancamía cuenta con talleres en todas las oficinas y acceso gratuito a la plataforma virtual ‘Facilitamos su Progreso’.
- Adaptación de los negocios al cambio climático: los diferentes cultivos y bienes que tienen los microempresarios rurales y urbanos no están exentos de los fenómenos climáticos extremos. Por ello, a través de Bancamía, los productores más vulnerables (quienes tienen menores ingresos y están en zonas de mayor riesgo climático). podrán adaptar sus unidades productivas buscando ser más resilientes a los fenómenos climáticos; para ello Bancamía tiene a su disposición una oferta de créditos a la medida de los productores del agro.
- Asegurar los negocios y el patrimonio: los microseguros se han convertido en una opción importante para que los microempresarios se aseguren y protejan sus unidades productivas y su patrimonio de diferentes eventos como: desastres naturales, hurtos, accidentes personales, incendios, entre otros.
En alianza con varias aseguradoras, a través de Bancamía, podrán adquirirse microseguros con cobertura para accidentes personales, hurto, asistencias a las mujeres, enfermedades graves, daños al negocio, seguro agrícola, exequias y maternidad.