A pesar del panorama incierto que ha generado la pandemia en el sector inmobiliario, la firma especializada en bienes raíces y gestión de inversiones JLL aseguró que ve un “gran potencial” en el mercado para data centers y vivienda en renta en Colombia, cuyo desarrollo se ha acelerado en comparación con otros más tradicionales como oficinas o espacios comerciales.
Según la compañía, dinámicas como el teletrabajo y el uso de la tecnología son la clave detrás del interés del mercado en inmuebles para el establecimiento de centros de datos y de vivienda en renta para trabajadores que buscan espacios más adecuados para llevar a cabo sus labores.
Jean Baptiste Wettling, country manager de JLL para Colombia, explicó que “la pandemia exacerbó la necesidad de individuos de acceder y almacenar datos en la nube y aceleró la necesidad de las empresas por mejorar su infraestructura de IT. Estos factores han multiplicado la demanda espacio en data centers y más para un país como Colombia donde ha venido aumentado rápidamente la penetración del internet. Nuestro país está apareciendo en el mapa de todos los grandes jugadores de data centers, fondos, desarrolladores, grandes empresas de tecnología (hyperscalers), que desean posicionarse en el mercado local y latinoamericano. Es un mercado bastante nuevo, pero que está desarrollándose de una forma fenomenal”, comentó.
Cambios en las preferencias inmobiliarias
La pandemia, de acuerdo con Wettling, ha generado también un paradigma en las preferencias de los clientes del mercado inmobiliario, sobre todo en lo referente a los espacios dedicados al trabajo presencial y al aprovechamiento del trabajo remoto.
“Empezando con el teletrabajo que está sacudiendo la manera de pensar y usar las oficinas. Así que hay un cambio claro en lo que se va a requerir el día de mañana: se van a demandar oficinas de pronto más pequeñas, pero mucho más atractivas. Para lograr que sean más atractivas tienen que estar en edificios de mejor calidad, con diseños y especificaciones renovados y llamativos”, dijo.
Sin embargo, el country manager de JLL considera que en este contexto, “donde el panorama de la economía es complicado”, las empresas piensan dos veces antes de invertir en oficinas nuevas, por lo que se están observando dos tendencias en simultánea: una necesidad por oficinas de mejor calidad y al mismo tiempo por más flexibles que antes.
De acuerdo con la firma, la demanda se orienta hacia espacios eficientes, robotizados y modernos para albergar procesos logísticos cada vez más complejos, sobre todo en mercados como el colombiano, que venían atrasados con la calidad de la infraestructura y de los edificios.
“Por el lado industrial, aunque la economía colombiana no tiene una base industrial tan importante como otros países, lo cierto es que esta crisis está haciendo repensar varios temas, especialmente en lo relacionado a la industria de la salud, que son sectores que se vuelven estratégicos”, afirmó el ejecutivo.