Es clave que las compañías sean conscientes de las implicaciones que esta condición puede tener en el trabajador y en la productividad del mismo, por lo que es necesario el desarrollo de diferentes iniciativas para contrarrestar esta situación.
La coyuntura actual llevó a que las compañías acelerarán la implementación de modelos híbridos de trabajo. De acuerdo con un estudio de PageGroup el 57% de las empresas en Colombia continúan trabajando de manera remota, así mismo, el 72% de estas considera implementar nuevas formas de trabajo después de la pandemia. “Estas nuevas dinámicas laborales han llevado a que las compañías deban implementar iniciativas alternas, con el objetivo de acompañar a sus colaboradores en estos procesos y así evitar el síndrome de agotamiento laboral o ‘burnout’”, afirma Emilsy Medina Chacón, docente del programa de Ingeniería Industrial de la Universidad El Bosque.
“Todas las personas en cualquier sector laboral pueden estar expuestas a factores que ocasionan el síndrome de ‘burnout’, sin embargo, es importante resaltar que las ocupaciones en las que los trabajadores tienen contacto directo con público, son más propensas a verse afectadas. Es clave que las compañías sean conscientes de las implicaciones que esta condición puede tener en el trabajador y en la productividad del mismo, por lo que es necesario el desarrollo de diferentes iniciativas para contrarrestar esta situación”, expresa Medina.
“Los colaboradores ya no solo están motivados por el salario o el plan de carrera, estos buscan un ambiente de trabajo propicio para poder explorar todo su potencial a través de experiencias positivas. En conjunto con otros factores, un buen ambiente laboral permite tener empleados motivados, bajas tasas de rotación, altos niveles de bienestar mental y, sin duda, un mejor rendimiento”, comenta Eliana López, Executive Manager de Michael Page.
¿Cómo identificar el síndrome de agotamiento laboral?
De acuerdo con el programa de ingeniería industrial de la Universidad El Bosque, los síntomas más característicos de esta condición son:
- Agotamiento emocional: derivado de la fatiga emocional y física, que no guarda proporción a la cantidad de trabajo por hacer.
- Condiciones físicas: puede presentarse aumento o pérdida de peso, dolores musculares o de cabeza, problemas gastrointestinales, ansiedad, depresión e insomnio.
- Despersonalización o desapego: el cual se refleja en una actitud de indiferencia al ejercicio de sus funciones, falta de compromiso hacia su trabajo, cambios en el comportamiento, tratos bruscos, irritabilidad o desmotivación.
- Disminución en la productividad laboral: afectando el desempeño del trabajador y a la organización.
Recomendaciones para contrarrestar el ‘burnout’
“Las estrategias para mitigar el agotamiento laboral deben girar en torno a la detección temprana de los factores que puedan desencadenar esto y actuar sobre los mismos, para evitar la exposición continua y prolongada a ellos”, comenta Medina.
Así mismo, el programa de Ingeniería Industrial de la Universidad El Bosque, entrega las siguientes recomendaciones para empleadores y colaboradores al respecto:
- Realizar pausas activas.
- Definir horarios de trabajo y respetarlos, que permitan el balance entre la vida personal y laboral.
- Aplicar horarios flexibles para el regreso a la oficina, que le permita al colaborador escoger la franja horaria que le sea más conveniente.
- Tener buenos hábitos alimenticios y de sueño, así como actividades de esparcimiento que le permitan a la persona desconectarse del trabajo y descansar apropiadamente.
- Ofrecer rutas y medios de transporte a sus empleados para trasladarse entre su casa y el trabajo. Está comprobado mediante estudios que esto reduce el estrés y la fatiga, lo cual redunda en mayor productividad y satisfacción laboral de los colaboradores. Además, disminuye la ansiedad por el riesgo de contagio en medios de transporte públicos.
- Instalaciones de trabajo debidamente habilitadas para cumplir con todos los protocolos de bioseguridad.
- Apoyo psico-social permanente a los colaboradores.
- Para las personas que continúan trabajando en casa, es clave que cuenten con un lugar exclusivo para desempeñar sus labores.
- Armar una agenda de trabajo con metas diarias y semanales y seguirla. Esto ayuda a cumplir los compromisos laborales, equilibrar tiempos de trabajo, personales y familiares, mantener la salud mental y física, reducir el riesgo psico-social derivado del trabajo y mejorar la satisfacción con el mismo.
“La coyuntura actual ha llevado a que los colaboradores prioricen la atención de asuntos de salud personales y familiares, lo que ha incrementado el ausentismo. Por otra parte, los empleados se empoderaron como cuidadores presentes de su familia, y ahora necesitan balancear sus obligaciones laborales con el cuidado y atención de los suyos. Si no se logra ese balance entre responsabilidades laborales y atención de lo personal y familiar, reducirán su compromiso o pueden llegar a renunciar, pues el confinamiento enseñó que se puede vivir con menos ingresos y que lo que importa es preservar la vida, la salud y atender a la familia”, afirma Martha Ruth Mendoza Torres, docente de Ingeniería Industrial de la Universidad El Bosque.