Las PYMES representan un pilar económico, pero los bancos tradicionales ofrecen productos estandarizados que no responden a sus desafíos.
En los últimos años, el sector financiero ha experimentado la entrada de nuevos actores que han fomentado la competencia. Las fintechs y plataformas digitales han sido pioneras en llegar a segmentos desatendidos como las PYMES, ofreciendo productos más adaptados a sus demandas específicas. El estudio de Bain & Company, titulado Small Businesses Don’t Want Banking Products; They Want Support Managing Their Finances, destaca las estrategias para ofrecer soluciones financieras más competitivas en un sector en constante crecimiento.
A nivel global, las PYMES representan un pilar esencial del crecimiento de los países. En economías como la estadounidense y en la Unión Europea, casi la mitad de las empresas son pequeñas o medianas. Sin embargo, pese a su importancia en la economía y la creación de valor, las PYMES han enfrentado dificultades para acceder a productos financieros que realmente se adapten a sus necesidades, debido a la falta de atención por parte de los bancos tradicionales.
Este vacío ha sido llenado por fintechs y neobancos, que han desarrollado productos específicos para las PYMES. Este éxito se debe a factores como tasas de interés competitivas, rapidez en la aprobación de préstamos y plazos de devolución flexibles. “La demanda de productos financieros por parte de las PYMES ha promovido la dinamización del sector financiero, al generar las condiciones para el desarrollo de productos ágiles y modernos que se ajusten a las necesidades de este grupo de empresas que comprenden una porción importante del mercado financiero en el país y en la región”, afirmó Diego Santamaría, Socio de Bain & Company, a propósito de la publicación de este estudio.
El estudio de Bain & Company señala que los bancos tradicionales han mantenido un enfoque de productos estandarizados, sin tomar en cuenta las prioridades y desafíos únicos de las PYMES. Como resultado, muchas de estas empresas han recurrido a alternativas fuera del sistema bancario tradicional para gestionar sus ingresos y acceder a financiamiento.
Asimismo, el informe subraya el auge de las plataformas digitales, que no solo ofrecen productos financieros, sino que también integran funciones para simplificar la gestión del flujo de caja y el control de gastos, aspectos clave para las PYMES.
En este contexto, Bain & Company propone algunas claves para que los bancos puedan desarrollar productos más ajustados a las necesidades de las PYMES:
- Enfoque centrado en el cliente: Las soluciones deben ofrecer interfaces fáciles de usar e integrar herramientas que combinen la gestión financiera con la gestión empresarial diaria, personalizando las funciones para cada cliente.
- Integración de datos: Las PYMES necesitan soluciones digitales que automaticen procesos como cuentas por cobrar, pagos y seguimiento de facturas, conectando diversas fuentes de datos para reducir el trabajo manual.
- Extensibilidad: Los sistemas financieros deben ser flexibles y permitir la incorporación de nuevas funciones, como software de planificación empresarial o aplicaciones de terceros, para adaptarse a las crecientes necesidades de las PYMES.
Para Bain, con estas propuestas, los bancos tradicionales tienen la oportunidad de recuperar terreno en el mercado de las PYMES, adoptando un enfoque integral similar al de las fintechs, que responda mejor a sus necesidades y desafíos.