En un entorno empresarial cada vez más dinámico, la Junta Directiva juega un papel
fundamental en la creación de valor dentro de las organizaciones. Más allá de su
función tradicional de supervisión, las Juntas deben adoptar un enfoque estratégico
que garantice la sostenibilidad del negocio, la rentabilidad financiera y el impacto
social.
Este ha sido el eje de discusión de diversos expertos, quienes resaltan la necesidad
de transformar la gobernanza corporativa para responder a los desafíos actuales.
“Nuestra misión se centra en apoyar y desarrollar líderes capaces de conectar,
innovar y conducir a las organizaciones hacia el éxito. La transparencia en torno a
los retos y obstáculos que encontramos en torno a los temas ASG es fundamental
para generar confianza y credibilidad en nuestros esfuerzos por replantear nuestras
estrategias”, asegura Camilo Bueno, socio líder del BLC y vicepresidente de
Crecimiento y Estrategia sobre ESG de KPMG.
La generación de valor dentro de una empresa no solo se mide en términos
financieros, sino también en su impacto en clientes, empleados y la sociedad. En
este contexto, la Junta Directiva tiene la responsabilidad de definir la visión y
objetivos estratégicos a largo plazo, garantizando la correcta ejecución de iniciativas
clave y supervisando los riesgos del negocio. Deyanira Díaz, directora de
Gobernanza, Riesgo y Complimiento sobre evaluación de Juntas Directivas de
KPMG, agrega que evaluar el desempeño de una Junta Directiva es fundamental
para el éxito de una compañía.
“Esta evaluación proporciona una visión crítica y objetiva de cómo se están tomando
decisiones y se están gestionando los recursos. Permite identificar fortalezas y
áreas de mejora de forma individual y colegiada sobre la Junta, promoviendo la
transparencia, la rendición de cuentas y la toma de decisiones informadas,
especialmente por la exposición que las Juntas tienen actualmente”.
El debate sobre el rol estratégico de las Juntas en la creación de valor seguirá
evolucionando a medida que el entorno empresarial continúe transformándose. Las
empresas que logren consolidar Juntas Directivas con visión estratégica, liderazgo
inclusivo y capacidad de adaptación estarán mejor posicionadas para enfrentar los
retos del futuro. Aquellas que aprovechen la tecnología digital en la gestión
empresarial, usen herramientas como la automatización, el análisis de datos y la
inteligencia artificial podrán mejorar la eficiencia operativa y optimizar la toma de
decisiones para generar impacto en todos sus grupos de interés.