Por: Mario Alejandro Molano Vega- Decano Facultad de Ciencias Sociales- Universidad Jorge Tadeo Lozano.
Estamos asisitendo a una transformación profunda de la sociedad colombiana. Esta no es otra que la del surgimiento de nuevas ciudadanías que están planteándole al país el enorme reto de materializar el sueño de la Constitución de 1991: la realización, a fondo, del Estado Social de Derecho y de una identidad nacional pluralista, tolerante y diversa.
Esta eclosión de las nuevas generaciones de ciudadanos no es gratuita. Los datos del Dane muestran la gravedad de la situación que enfrentan alrededor del 33 % de los jóvenes de nuestro país, más de un millón doscientos mil personas, quienes no han logrado acceder ni a instituciones de educación superior de calidad, ni al mercado laboral. Así mismo, diferentes encuestas han mostrado el nivel de desconfianza y frustración que sienten muchos jóvenes frente a instituciones de orden político como el Congreso de la República, o más aún, frente a las garantías que en materia de derechos humanos el Estado colombiano debe brindar a toda la población a través de la Fuerza pública, Policía y Ejército.
Pero las nuevas ciudadanías también muestran una mirada crítica frente a otros ámbitos de la vida nacional. Un caso muy notable es la gran desconfianza que sienten los jóvenes frente a la manera en que los medios de comunicación tradicionales gestionan la información y la opinión pública. En esa misma dirección, las nuevas ciudadanías están cuestionando de fondo componentes culturales que siguen arraigados a nuestros imaginarios colectivos: las prácticas machistas y discriminatorias, las actitudes intolerantes que se resisten a la construcción de la paz, las prácticas de corrupción y la connivencia solapada de la criminalidad con sectores políticos.
Este es el país frente al cual desde la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, asumimos cuatro retos para salir de la crisis:
- Defensa y desarrollo de la Constitución de 1991: a diferencia de lo que ha ocurrido en Chile, en Colombia los reclamos de las nuevas ciudadanías se encuentran recogidos en la Constitución política. Si se quiere, esta es una nueva etapa de un proceso de democratización del país que ya había comenzado con la promulgación hace 30 años justamente de la carta política colombiana. Por esa razón, uno de los retos para salir de la crisis radica en el reconocimiento de la Constitución como instrumento fundamental para canalizar las trasnformaciones que el país requiere. Más allá de la formación que todo abogado requiere, en el programa de Derecho de La Tadeo las áreas de Derecho Constitucional, Derecho Ambiental y sistemas de protección de Derechos Humanos son nuestra prioridad. El sentido de compromiso social de nuestras nuevas generaciones se desarrolla plenamente a través de espacios como el Consultorio Jurídico, con un especial énfasis en derechos humanos y escenarios como los Green Talks, donde las cuestiones ambientales y sus posibles soluciones son discutidas.
- Nuevos liderazgos y ejercicio a fondo de la ciudadanía: frente al desgaste de la clase política tradicional, el enorme reto que asumimos desde el programa de Ciencias Políticas y Gobierno, así como de Relaciones Internacionales, es el de formar a las personas que serán capaces de renovar los liderazgos que el país requiere con urgencia especialmente para atender los problemas locales de ciudades y municipios y para gestionar el apoyo internacional que asegure el desarrollo de nuestro país. Pero semejante tarea parte de una premisa más elemental y quizás más urgente: la necesidad de que las nuevas generaciones ejerzan su ciudadanía plenamente, exigiendo sus derechos y ejerciendo control sobre las instituciones, pero al mismo tiempo gestionando propuestas alternativas y con profundo respeto por la vida, la diferencia y la ley.
- Ejercicio de la comunicación y el periodismo para la democracia: con la masificación de Internet y las teconologías digitales, los medios tradicionales de comunicación perdieron terreno sobre el control de la información y se hizo cada vez más evidente la presión de grupos económicos sobre los medios informativos y de opinión. De ahí el reto que el programa de Comunicación Social y Peridismo de La Tadeo ha adquirido en el sentido de formar periodistas y comunicadores que investigan, ejercen su oficio con autonomía empleando los nuevos recursos tecnológicos. De ese modo, el semillero CrossMediaLab y la emisora Óyeme son espacios en los que nuestros estudiantes desarrollan sus capacidades de contar las historias que poca visbilidad alcanzan en los grandes medios y que, sin embargo, constituyen el centro de nuestra realidad social.
- Construcción de una identidad nacional pluralista: la explosión social que vivimos este año posee una dimensión cultural muy importante. La identidad nacional tradicionalista y excluyente está puesta en tela de juicio por comunidades indígenas y afrodescendientes, por las organizaciones de víctimas del conflicto armado, por el movimiento feminista y por las comunidades LGTBIQ. Por esta razón, los programas de Cine y TV, Estudios Literarios y Edición e Historia del Arte, se plantean el reto de convertirse en los escenarios ideales para que las juventudes cuenten las historias de este país diverso, de mestizajes culturales fascinantes y lleno de experiencias humanas conmovedoras que no podemos dejar de contar, de difundir y de celebrar.
Esta es la apuesta que desde la Facultad de Ciencias Sociales queremos hacer por el país diferente que las nuevas ciudadanías reclaman. Las grandes transformaciones requieren una educación de alta calidad, pertinente, actual y con gran sentido de compromiso social.