El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la organización neerlandesa sin ánimo de lucro VEI firmaron un acuerdo de cooperación en Colombia el pasado 29 de agosto. Ambas partes invertirán conjuntamente 800.000 dólares en un programa que apoyará a varias empresas públicas de agua en Colombia en la mejora de su eficiencia, seguridad hídrica y sostenibilidad.
Esta inversión forma parte del Programa Conexión Agua, una iniciativa regional impulsada por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), el Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento (FCAS), la Secretaría de Cooperación Económica y Desarrollo (SECO) de Suiza, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Asociación Colombiana de Ingeniería Sanitaria y Ambiental (ACODAL) y la Asociación Nacional de Servicios Públicos y Comunicaciones (ANDESCO), que busca transformar el acceso al agua potable en Colombia, beneficiando a más de 25 millones de personas en zonas rurales y urbanas.
Con la reciente inversión de 800.000 dólares por parte de VEI y el BID, el programa se pondrá en marcha en siete empresas públicas de agua de distintas regiones del país: Empresas Públicas de Chinácota (Emchinac), RedVital Paipa S.A. E.S.P. (Empresa de Servicios Públicos de Paipa), Empresa de Obras Sanitarias de Caldas (Empocaldas), Aguas de Manizales, Aguas de Buga, Aguas de Villavicencio y una séptima empresa aún por definir.
El objetivo principal es fortalecer los servicios de agua, promover la sostenibilidad y garantizar un acceso equitativo al recurso hídrico. “Desde VEI aportaremos el conocimiento para que las empresas mejoren tanto en eficiencia económica como en eficiencia técnica.” Señaló Robbert van der Bij, Country Manager de VEI en Colombia.
En cuanto a la eficiencia económica, se trata de pérdidas por agua no contabilizada; que entra a la red, pero que no se factura, “esto se da por tener conexiones fraudulentas o medidores que no funcionan”, añadió van der Bij. En cuanto a lo técnico, se refiere a fugas en la red, “tanques que no están bien manejados, que se rebosan, entre otras razones”. Explicó van der Bij.
Al implementar estas mejoras, las empresas públicas podrán fortalecer su rendimiento financiero y esto se traduce a más recursos económicos disponibles para invertir y ampliar la cobertura del servicio a más zonas.
Situación del agua en Colombia
En Colombia, cerca de 7 millones de personas –aproximadamente el 13 % de la población– no tienen acceso adecuado a agua potable segura, según la Danish Quality of Life Survey.
Aunque el desafío es grande, el país también cuenta con empresas públicas comprometidas que trabajan para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad del servicio. VEI ha estado presente en Colombia desde 2014 y considera al país un buen socio para la cooperación. “La razón por la que nos gusta trabajar en Colombia es que el nivel en las empresas públicas es bueno y existe una disposición para mejorar; las empresas tienen capacidad de ejecución y logran implementar las recomendaciones que hacemos”, explica van der Bij. Los resultados lo demuestran: según mediciones del BID, algunas empresas de agua en Colombia han logrado aumentar su eficiencia hasta en un 28 % con el apoyo de VEI.
VEI es propiedad de las empresas neerlandesas de agua potable Vitens y Evides, y colabora con todas las utilities de los Países Bajos y con un laboratorio nacional de calidad del agua. Actualmente, está desarrollando 41 proyectos en 21 países, desde Filipinas hasta Colombia.
El núcleo de su trabajo son los Water Operator Partnerships: colaboraciones a largo plazo entre expertos neerlandeses y utilities locales, enfocadas en la transferencia de conocimiento y la mejora continua. “Se trata de una cooperación sostenible, no de capacitaciones puntuales”, enfatiza Van der Bij.
Este nuevo proyecto que beneficiará a Colombia, tendrá una duración prevista de 24 meses, y las primeras misiones técnicas ya están planificadas para octubre de 2025. Más allá de los resultados operativos, representa una apuesta por la sostenibilidad, al reducir el desperdicio de agua, y por garantizar que más comunidades del país tengan acceso a este recurso esencial.