Las nuevas medidas de restricción de la movilidad y cuarentenas estrictas que han implementado varias ciudades del país, por el aumento de la ocupación de las UCI, podrían generar un impacto económico entre 8,3 y 12,5 billones de pesos, equivalentes al 0,8 % y 1,2 % del PIB, producto de una reducción en la operación de la actividad económica, según reveló un nuevo informe de Fedesarrollo.
Por su parte, el mercado laboral también se vería afectado, con un aumento entre 0,6 pps y 0,9 pps en la tasa de desempleo (entre 146 mil y 220 mil desempleados).
Los departamentos con medidas de restricción a la movilidad y a la actividad productiva más fuertes son los que aportan en mayor proporción al costo económico estimado.
Es así que Bogotá, que inició las primeras cuarentenas sectorizadas y toques de queda nocturnos, podría acumular cerca del 50 % de las pérdidas nacionales, mientras que Antioquia tendría una participación del 15,9 % y Valle del Cauca 11%, respectivamente, equivalentes a 4,1, 1,3 y 0,9 billones de pesos, en el escenario bajo.
Esta participación estimada se encuentra por encima del aporte de estos departamentos al PIB nacional, especialmente en el caso de Bogotá, que con un 26 % de participación en el PIB aporta prácticamente la mitad del costo total estimado.
Aunque el panorama es negativo, la estimación del nuevo costo es inferior al estudio realizado en abril de 2020, donde se estimaba un rango de 48 a 65 billones de pesos por un mes de cuarentena estricta. Al respecto, el director ejecutivo de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, explica que “esto se debe a la implementación de medidas menos restrictivas a las observadas entre marzo y abril del 2020, a la no aplicación de las medidas de forma general en el territorio nacional, y a la adaptación de las empresas y los trabajadores al nuevo contexto relacionado con la pandemia del COVID-19”.
El director precisó que “el costo final dependerá de eventuales restricciones adicionales a las tomadas hasta la fecha, de acuerdo con la evolución de la ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), y de la rapidez con que los flujos de actividad productiva retornen a las condiciones previas a la implementación de estas medidas”.
Los sectores de comercio y transporte, industrias manufactureras y actividades inmobiliarias aportarían los costos económicos más altos, con una participación respectiva del 35, 8 %, 11,8 % y 8,5 %.
De acuerdo a los resultados del informe, Fedesarrollo considera además que las decisiones orientadas a controlar y mitigar el contagio del virus deben
estar acompañadas de medidas complementarias para apoyar al aparato productivo, especialmente en los sectores más afectados, así como la aceleración de la ejecución de apoyo para los hogares más vulnerables.