ARTEAGA, una compañía de desarrollo fundada en Colombia en 2013, opera actualmente en 10 países de América Latina. Esta firma es dueña de los principales estudios sindicados de la industria extractiva (Brújula Minera y Barómetro Petrolero), del Índice de Inversión Social Privada, del Observatorio Colombiano de la Industria del Cannabis y del Monitor de Desarrollo Territorial.
¿Qué motivó el cambio de nombre de «Jaime Arteaga y Asociados» a «Arteaga»? ¿Qué significa este nuevo nombre para la firma?
La evolución de nuestra marca tiene como objetivo adaptarse de manera más efectiva a los nuevos mercados de América Latina, donde estamos trabajando y buscando consolidar nuestra presencia. Al presentarnos como Arteaga – Sinapsis para el Desarrollo, clarificamos nuestro enfoque y facilitamos la comprensión de nuestro mensaje en el contexto latinoamericano. Esta estrategia no solo refuerza nuestra identidad, sino que también responde a la creciente demanda del mercado.
Desde su fundación en 2013, ¿cómo ha evolucionado la firma? ¿Qué lecciones clave han aprendido durante este proceso?
Estos 13 años han confirmado que nuestro enfoque de “sinapsis para el desarrollo”, que implica la conexión entre lo público y lo privado, es clave para lograr un impacto significativo en objetivos ambiciosos. Hemos aprendido que ninguna organización, especialmente en el sector privado, puede prosperar en un mercado en desarrollo si no se considera a sí misma como una entidad comprometida con el desarrollo, independientemente de su sector.
Ya sea en comunicaciones, consumo masivo, infraestructura o energía, todas las empresas deben verse como organizaciones cuyo modelo de negocio contribuye al desarrollo sostenible. Esto les permite adaptarse mejor al mercado y a la sociedad en la que operan. En particular, en sectores como el minero-energético, agrícola y de negocios verdes, es fundamental que las empresas se perciban a sí mismas como inversiones para el desarrollo. Solo así podrán avanzar y prosperar en un entorno cada vez más exigente y dinámico.
¿Van a incorporar nuevos servicios como parte de la expansión?
Yo diría que estamos comprometidos a ofrecer nuestros servicios para facilitar la expansión hacia nuevos sectores. Nuestro enfoque se centra en habilitar operaciones mediante la obtención de la licencia social para operar, la gestión de la reputación, la adaptación a los entornos operacionales y la gestión de inversiones sociales y ambientales privadas.
Actualmente, estamos llevando estos servicios a nuevos sectores, que incluyen infraestructura, energía, agroindustria, centros comerciales y todo el sector productivo que busca consolidar y expandir sus operaciones en un marco de contribución al desarrollo sostenible. Nuestra meta es apoyar a estas industrias en su crecimiento, asegurando que sus actividades sean responsables y beneficiosas tanto para la sociedad como para el medio ambiente.
¿Cuál es la expectativa de la marca al entrar en nuevos mercados como Estados Unidos y Ecuador?
Hemos estado trabajando en Ecuador con notable éxito durante los últimos dos años, colaborando estrechamente con el sector minero para habilitar algunos de los proyectos más importantes del país. Nuestra presencia en Ecuador tiene como objetivo expandir nuestros servicios a otros sectores a través de alianzas con representantes altamente reconocidos en el país.
Además, nuestras oficinas en Ecuador se enfocan en el desarrollo de negocios, lo que nos permitirá establecer un contacto directo con las grandes empresas multinacionales que operan en toda América Latina. Nuestra unidad de desarrollo de negocios en Estados Unidos facilitará que estas empresas se conecten directamente con nuestra organización desde sus casas matrices, fortaleciendo así nuestras relaciones y ampliando nuestras oportunidades de colaboración.
¿Qué aspectos clave de su experiencia en Colombia considera los más importantes para trasladar a los países en los que abrirá las nuevas sedes? ¿Qué nuevos retos esperan enfrentar en cada país?
Colombia es un país que presenta un entorno diverso, donde se pueden encontrar contextos altamente desarrollados y sofisticados en las grandes ciudades, así como áreas con urgencias y particularidades críticas de desarrollo, especialmente en las zonas más apartadas. Esta diversidad en los niveles de desarrollo ha creado un escenario propicio para implementar soluciones que promuevan un desarrollo inclusivo y sostenible, tanto en colaboración con el sector público como con el privado.
La necesidad de abordar estas disparidades ha generado una demanda creciente de aprendizajes y estrategias que se adapten a las realidades locales, lo que abre oportunidades significativas para nuevos mercados. En este sentido, es fundamental fomentar un enfoque integral que reconozca y aproveche las capacidades únicas de cada país, contribuyendo así a un desarrollo más equitativo y sostenible en toda LATAM.
Además de los países ya mencionados, ¿qué otras aspiraciones de apertura tiene en Latinoamérica?
Ya estamos operando en 10 países de América Latina y buscamos profundizar nuestra presencia en toda LATAM. Desde nuestra oficina en Estados Unidos, gestionaremos las relaciones con las multinacionales que tienen presencia regional. Esta estrategia nos permitirá fortalecer nuestras conexiones y ampliar nuestras oportunidades de colaboración en un mercado en constante crecimiento y evolución.
En este nuevo cambio, ¿cómo se ve el país de cara al desarrollo sostenible para 2025?
Creo que comparto la visión de muchos expertos que consideran que Colombia se define por su resiliencia. En 2025, este atributo se hará aún más evidente. A medida que enfrentamos desafíos económicos y sociales, la capacidad del país para adaptarse y superar adversidades será crucial para su desarrollo.
Con estudios como Brújula Minera y Barómetro Petrolero,¿qué cambios o tendencias han identificado a lo largo de los años en los resultados de estos estudios?
Hay una evolución en la opinión pública respecto al aprovechamiento responsable de los recursos naturales para el desarrollo. La minería y la industria petrolera han estado a la vanguardia de este concepto, adaptándose durante años para garantizar prácticas responsables y sostenibles. Cada vez más, la sociedad parece reconocer y valorar estos esfuerzos. Este reconocimiento es fundamental para fomentar un diálogo constructivo entre las industrias y las comunidades, promoviendo un desarrollo que beneficie a todos.
Pregunta abierta: ¿Hay algún aspecto que le gustaría resaltar o algún mensaje clave que considere importante compartir?
Colombia tiene mucho que aportarle a América Latina en términos de inversión privada para el desarrollo. Al mismo tiempo, es fundamental para nosotros aprender de los demás países de la región. Nuestro proceso de internacionalización busca establecer esta doble vía: compartir nuestro conocimiento y, a su vez, absorber aprendizajes que permitan a América Latina avanzar más rápidamente hacia sus objetivos de desarrollo. Esta colaboración no solo fortalecerá nuestras capacidades, sino que también contribuirá a un crecimiento sostenible y equitativo en toda la región.