Colombia avanza hacia un transporte de carga sostenible liderado por la optimización y la electrificación
impulsadas por iniciativas como GiroZero.
La transición hacia una economía baja en carbono se erige como un desafío global. En ese desafío, Colombia está respondiendo con un enfoque estratégico y con la implementación de iniciativas innovadoras para descarbonizar la economía, con un énfasis particular en el Transporte Automotor de Carga (TAC).
En este panorama, el GiroZero, liderado por la Universidad de los Andes, se ha consolidado como un
actor fundamental, impulsando avances significativos y delineando estrategias concretas para un futuro del transporte de carga más sostenible en el país y la región.
El profesor Gordon Wilmsmeier, Kühne Professorial Chair in Logistics de la Universidad de los Andes, ha
sido una voz líder en esta transformación, enfatizando la urgencia de la acción al afirmar que “es momento de actuar porque solamente hay un planeta. Un planeta que puede vivir sin nosotros, pero nosotros no podemos sin él”. En este contexto, GiroZero ha materializado esta urgencia a través de una serie de iniciativas y logros concretos a lo largo de sus cuatro años de operación.
Uno de los pilares de la estrategia de GiroZero ha sido la optimización logística, buscando identificar y
abordar las ineficiencias inherentes a las operaciones de transporte. Los análisis exhaustivos de perfiles de operaciones, rutas y GPS, recopilados en colaboración con empresas líderes del sector y dando uso estratégico a datos del sector público (Registro Nacional de Carga), han revelado oportunidades significativas para la reducción de emisiones.
El profesor Wilmsmeier destaca este punto al señalar que el 59 % de los viajes de carga en Colombia se efectúan sin carga, subrayando la oportunidad de establecer una gestión más eficiente para disminuir la huella de carbono del TAC. GiroZero ha cuantificado este potencial, estimando que si se optimizan estos recorridos, se puede ahorrar, eliminar más de 2 millones de viajes hasta 2050 y eliminar las respectivas emisiones de CO₂.
Además de la optimización de las operaciones existentes, GiroZero ha puesto un fuerte énfasis en la transición hacia vehículos de carga de cero y bajas emisiones. Los camiones eléctricos pueden jugar un rol muy relevante en la transición. Reconociendo que la infraestructura de recarga es un factor crítico para la adopción masiva de esta tecnología, el proyecto ha desarrollado un modelo pionero para la priorización de corredores de transporte y la cuantificación de la demanda de energía eléctrica.
Este modelo, tal como lo explica el profesor Wilmsmeier al afirmar que “la infraestructura de recarga de vehículos de transporte automotor de carga es fundamental para incrementar las tasas de adopción de camiones y tractocamiones eléctricos, busca guiar las inversiones estratégicas en la infraestructura necesaria para soportar una flota de carga eléctrica en crecimiento”.
“Es momento de actuar porque solamente hay un planeta. Un planeta que puede vivir sin nosotros, pero nosotros no podemos sin él”.
Gordon Wilmsmeier, Kühne Professorial Chair in Logistics de la Universidad de los Andes.
La colaboración multisectorial ha sido otro elemento distintivo del enfoque de GiroZero. El proyecto ha logrado construir una red sólida con más de 1.200 seguidores del sector público, privado y la academia. Esta colaboración ha facilitado la generación de conocimiento compartido, la identificación de desafíos comunes y la co-creación de soluciones innovadoras para la descarbonización del TAC.
El Gobierno Nacional también ha desempeñado un papel importante, estableciendo marcos regulatorios e impulsando políticas que complementan los esfuerzos de iniciativas como GiroZero. El profesor Wilmsmeier destaca la alineación de sus objetivos con las políticas gubernamentales al señalar que “muchas de las metas están alineadas con las bases del Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno Nacional”.
La generación de conocimiento y la capacitación han sido pilares fundamentales de la estrategia de GiroZero. A través de la certificación de más de 500 conductores en prácticas de eco-conducción y la capacitación de más de 100 profesionales en áreas clave de la descarbonización del transporte, el proyecto está fortaleciendo las capacidades del talento humano en el sector. El profesor Wilmsmeier subraya la importancia de esta labor al mencionar la “Certificación Smart Driver”, buscando profesionalizar el sector y promover una cultura de conducción eficiente.
Los avances de GiroZero se han traducido en resultados concretos, como la reducción estimada de las emisiones anuales de CO₂ entre 2019 a 2024 de 71,2 a 67,6 gCO₂/ tonelada-km. Si bien el profesor Wilmsmeier reconoce que “estos logros son pequeños o de pocos puntos porcentuales”, también enfatiza que “estos significan un atisbo de esperanza para que la meta de cero emisiones sea una realidad en 2050 por medio de iniciativas como GiroZero”.
Así pues, Colombia está avanzando de manera decidida en la transición hacia una economía baja en carbono en el sector del transporte de carga, y la labor de GiroZero se erige como un ejemplo de liderazgo e innovación. A través de estrategias enfocadas en la optimización logística, el impulso a la electrificación, la colaboración multisectorial y la generación de conocimiento, el país está sentando las bases para un futuro del transporte más limpio, eficiente y sostenible, con iniciativas como GiroZero marcando el camino a seguir.