Zuly Matallana – Founder and CEO Tiara.
Durante mucho tiempo, el emprendimiento fue un espacio dominado por hombres. Sin embargo, en la última década hemos visto un cambio profundo: cada vez más mujeres están liderando empresas, innovando en sectores clave y transformando la manera en que entendemos los negocios. La mujer emprendedora de hoy no solo busca rentabilidad, sino también propósito, impacto social y sostenibilidad.
El emprendimiento femenino nace muchas veces de experiencias personales y de un deseo de cambiar realidades. Detrás de cada negocio creado por una mujer, encontramos historias de resiliencia, creatividad y valentía. Desde aquellas que comienzan con pequeños proyectos para apoyar a su familia, hasta quienes levantan compañías globales, todas aportan una perspectiva única y necesaria.
Además, la mujer emprendedora suele tener una visión más integral: piensa en la comunidad, en el medio ambiente y en el legado que deja a las siguientes generaciones. Este enfoque ha abierto camino a empresas que combinan innovación con responsabilidad social, demostrando que se puede crecer sin dejar de lado los valores.
Los desafíos persisten. Muchas mujeres enfrentan barreras de acceso a financiamiento, falta de representación en espacios de decisión y la doble carga de equilibrar la vida laboral y familiar. Aun así, ellas continúan rompiendo esquemas, apoyándose en redes colaborativas y creando oportunidades para otras.
El emprendimiento femenino no es una moda, es una fuerza transformadora que inspira a las sociedades a ser más inclusivas, conscientes y humanas. Invertir en mujeres emprendedoras es invertir en el futuro: en un mundo más justo, sostenible y lleno de posibilidades.