La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) prevé que el consumo de petróleo se recupere a partir de la segunda mitad del año, gracias a los estímulos económicos de los gobiernos, siempre y cuando las campañas de vacunación puedan contener la expansión de la pandemia del coronavirus.
En su nuevo informe sobre la situación del mercado, el grupo petrolero eleva levemente su anterior previsión de consumo para 2021, hasta los 96,05 millones de barriles por día (mbd), un 6,4 % más que en 2020 aunque lejos de los 100 mbd que el mundo quemaba a diario hasta 2019.
Aún así, los expertos de la OPEP estiman que la situación seguirá siendo incierta y la evolución del mercado en los primero meses del año será peor de lo previsto.
Lentitud en la vacunación
Por un lado, el consumo de combustibles de transporte se recuperará en la primera mitad del año menos de lo esperado.
Por otro, las tasas de infecciones siguen siendo muy altas en Europa, Estados Unidos y América Latina, lo que ha provocado que se prolonguen o incluso endurezcan las medidas de confinamiento, recuerdan los analistas de la OPEP.
«Adicionalmente, se asume que un progreso más lento de las vacunaciones retrasará más los objetivos de inmunidad de grupo en algunos países y regiones, y la aparición de nuevas variantes (del virus) en muchos países ha añadido más incertidumbre», según se señala en el informe.
Así, la OPEP ha reducido en un 1 % su cálculo de consumo para los tres primeros meses del año.
A partir de ahí, sin embargo, sí espera una mejora de la demanda por encima de lo previsto en su informe de enero.
Más consumo del transporte
Por eso, la OPEP indica que «(..) se espera un crecimiento más fuerte en los combustibles de transporte en la segunda mitad de 2021, basado en el supuesto de que los programas de vacunación ayudarán a contener la expansión de la covid-19, y que los masivos programas de estímulo anunciados tendrán un impacto positivo».
China será de nuevo el país que más tire de la demanda, con una subida de su consumo del 8,45 %, hasta los 14,4 mbd.
El gigante asiático se afianza así como el segundo mayor consumidor de llamado «oro negro», por detrás de EEUU, con 19,7 mbd, y por encima del bloque de los países ricos de Europa, que quemarán en 2021 un 5 % que en 2020, hasta los 13 mbd.
Respecto a 2020, las nuevas estimaciones de la OPEP señalan que la caída de la demanda respecto a 2019 fue del 9,72 % un poco menos de lo inicialmente calculado, pero aún así una contracción, debido a la COVID-19, que la propia OPEP califica de «histórica».
Destaca la esperada caída de las extracciones de petróleo de esquisto en Estados Unidos, por segundo año consecutivo, aunque el país americano seguirá siendo el primer extractor de crudo, por delante de Rusia, que recortará en casi un 2 % su bombeo, y Arabia Saudí.
La OPEP destaca que la subida de los precios del crudo, el barril OPEP ha ganado, por ejemplo, un 17 % en lo que va de año, se debe a la estrategia de la OPEP y sus socios, entre ellos Rusia, de mantener limitado el suministro.
Los 13 países del grupo con sede en Viena extrajeron el pasado mes, según fuentes independientes, 25,5 mbd, en la línea de los últimos meses.
EFE