El turismo de eventos se ha consolidado como uno de los principales motores de crecimiento en la industria turística, tanto a nivel nacional como internacional. Ferias, congresos, festivales culturales y musicales y grandes eventos deportivos no solo atraen a viajeros con alto poder adquisitivo, sino que impulsan la ocupación hotelera durante todo el año, dinamizan economías locales y fortalecen la posición de los destinos en el escenario internacional.
Este segmento, que antes era considerado de nicho, hoy representa una oportunidad estratégica para la diversificación del turismo, la creación de valor en la cadena de servicios y consolida a destinos como Colombia dentro del mapa global de grandes eventos.
Según cifras de ProColombia, el turismo MICE (Meetings, Incentives, Conferences and Exhibitions) movilizó en 2023 a más de 9.000 asistentes internacionales, con un gasto promedio por evento superior a los USD 885 por persona, más del doble que un turista vacacional tradicional. Además, Colombia fue sede de más de 100 eventos internacionales reconocidos por la ICCA, ubicándose como el tercer país con más eventos en la región, solo detrás de Brasil y México.
Además de las ciudades consolidadas como Cartagena, Bogotá, Medellín y Cali, se están posicionando nuevos destinos como Barranquilla, Bucaramanga, San Andrés y Santa Marta, los cuales recibirán parte de los 44 eventos internacionales ya confirmados para el periodo 2024-2027, con una proyección de más de 31.000 asistentes. La desestacionalización de la demanda y el fortalecimiento de capacidades locales convierten a este tipo de turismo en una palanca de desarrollo regional.
Según Jaime Ulloa, Gerente General de Viajes Circular, agencia de viajes con 31 años en el mercado, “el turismo de eventos ha pasado de ser un complemento a representar un eje estratégico del desarrollo turístico que exige soluciones logísticas especializadas. Estamos ante un perfil de viajero exigente, planificado y con interés en experiencias significativas. Esto ha transformado la manera en que diseñamos y gestionamos los servicios turísticos”.
El fenómeno no se limita a visitantes extranjeros. Los colombianos están viajando cada vez más para participar en festivales culturales como el Petronio Álvarez o Rock al Parque, congresos como ANDICOM, la Feria Internacional del Libro y eventos deportivos como la Media Maratón de Bogotá, y partidos de torneos internacionales de fútbol con sede en el país. También crece el interés en eventos internacionales como el Mundial de Fútbol, Expo Dubai, festivales como Tomorrowland y congresos médicos y tecnológicos en Europa y Estados Unidos.
En línea con esta transformación, Viajes Circular ha venido especializándose en los últimos años en la operación de viajes asociados a eventos nacionales e internacionales, desarrollando un modelo de negocio basado en la gestión integral de experiencias: desde el diseño logístico y los boletos, hasta las alianzas con proveedores internacionales y la atención personalizada para distintos tipos de viajero.
“La clave ha sido evolucionar con el mercado. Con nuestra experiencia de más de tres décadas, hemos sabido adaptarnos con soluciones robustas e innovadoras. El viajero que asiste a un evento no busca solo un destino, busca una experiencia completa. Nuestra apuesta ha sido siempre entender al viajero y responder a sus motivaciones. En el turismo de eventos no hay espacio para errores. Cada detalle cuenta.”, asegura Ulloa.
Con miras a 2025, la compañía proyecta seguir acompañando a viajeros en experiencias como las eliminatorias de la Selección Colombia, circuitos de Fórmula 1 y el Jubileo en Roma, apostando por un modelo de atención especializado que potencie el crecimiento de este segmento.