El acoso laboral es más frecuente de lo que se piensa.
Es una situación que termina por afectar de manera psicológica a quienes lo han vivido, limitando su productividad, vulnerando su autoestima, deteriorando las relaciones laborales y afectando de manera profunda a sus víctimas, quienes en muchas ocasiones prefieren guardar silencio por temor o simplemente por falta de pruebas para soportar su realidad.
El acoso laboral puede presentarse entre compañeros y no necesariamente a través de jefes, según lo evidencia el informe ELSA (Espacios Laborales sin Acoso) 2022, que analizó a más de 120 empresas en Colombia, mediante una herramienta digital desarrollada por GenderLab, con el apoyo y financiamiento del BID. Los resultados concluyen que el 42% de los casos de acoso sexual laboral se dan entre compañeros.
De acuerdo con Julio César Pineda, director del programa de psicología de la Fundación Universitaria San Mateo, el acoso laboral se presenta en un entorno donde existe mayor presión, propiciando alta exigencia que genera afectación psicológica, ansiedad, depresión y angustia, siendo uno de los retos más importantes a abordar en 2024.
“A pesar de que muchas empresas cuentan con políticas de inclusión y diversidad, equidad de género y manuales expresos donde se prohíbe el acoso laboral, en el día a día estos lineamientos se quedan cortos para contrarrestar prácticas de este tipo”, explicó Pineda. Según la encuesta mundial de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Lloyd’s Register Foundation (LRF) y Gallup, casi el 23% de personas empleadas han experimentado violencia y acoso en el trabajo, ya sea física, psicológica o sexual.
De igual manera, este mismo estudio determina que existen algunos factores que impiden a las personas hablar sobre estas situaciones, entre los que se encuentran la vergüenza, la culpa, la falta de confianza en las instituciones, o porque algunas de estas conductas inaceptables son consideradas ‘normales’.
De acuerdo con los resultados encuesta acoso sexual en el ambiente laboral, del Ministerio de Trabajo, la mayoría de las víctimas de este tipo de mobbing son mujeres, no obstante, el 41% prefiere sobrellevar la situación individualmente, antes que denunciar, por miedo a quedarse sin trabajo. “El tema de género en el acoso laboral y sexual se enfoca mayormente en las mujeres, debido a la percepción de debilidad y sensibilidad. Sin embargo, también se puede dar acoso hacia hombres, pero no se reconoce debido a la burla y presión social”, recalcó Pineda.
Muchas personas desconocen cómo hacer frente a este problema. Según el VI Estudio de Equidad de Género en las Empresas, elaborado por Ipsos en 2023, solo 1 de cada 10 ejecutivos pudo reportar los hechos de acoso a algún superior, lo cual corrobora que estas conductas sigan pasando de alguna manera desapercibidas y que no se tomen correctivos al respecto.
¿Cómo abordar la problemática?
Para Julio César Pineda, en toda organización es igualmente importante abordar el tema del acoso laboral y sexual.
- Una forma de hacerlo es a través de la creación de comités de convivencia laboral, que se encarguen de tratar estos temas de manera recurrente.
- Estos comités pueden ser conformados por representantes de los empleados y empleadores, y su función principal es promover un ambiente de trabajo seguro, respetuoso y libre de acoso.
- Pueden llevar a cabo actividades de sensibilización, capacitación y prevención, así como recibir denuncias y gestionar los casos de acoso que se presenten.
- Es recomendable que estos comités se reúnan al menos cada 3 meses, para evaluar la situación laboral, identificar posibles casos de acoso y tomar medidas preventivas o correctivas, según sea necesario.
- Además, es importante que los empleadores establezcan políticas claras contra el acoso laboral y sexual, y que estas sean comunicadas de manera efectiva a todos los empleados. Esto ayudará a crear conciencia y fomentar un ambiente de trabajo seguro y respetuoso.
Cabe resaltar que la prevención y el abordaje del acoso laboral y sexual es responsabilidad de todos, y es fundamental trabajar juntos para crear entornos laborales sanos, debido a que las conductas de acoso pueden llegar a afectar el desempeño de los empleados, su vida personal y autoestima. Incluso, existe el convenio sobre la violencia y el acoso, 2019 (núm. 190) de la Organización Internacional del Trabajo, que legitima el respeto, la promoción y el aseguramiento del derecho de toda persona al trabajo libre de violencia y acoso.
De igual manera, según Pineda, se deben tener en cuenta aspectos fundamentales para la convivencia en el trabajo como lo son la comunicación, el establecimiento de límites y el entendimiento de las necesidades de los demás, lo cual repercute en una salud mental óptima y en un comportamiento basado en el respeto hacia el otro.