A nivel mundial, la pandemia causada por el covid-19 provocó serias afectaciones en los diferentes sectores de la economía, variaciones en los comportamientos sociales y cambios en los hábitos de consumo.
Ejemplo de ello, ha sido el impacto que la industria de cosméticos y belleza ha tenido, donde a raíz de los confinamientos, la implementación del trabajo remoto y el constante uso del tapabocas, se impulsó un decrecimiento en las ventas particularmente de labiales y se incrementó en productos para ojos.
En Colombia, este comportamiento no es ajeno y luego de que en 2020 se registrara una caída del 6,3% del sector, este 2021 empresas como L’Oreál han tenido que apostarle a la elaboración de productos de belleza y cuidado en los que se integran la innovación y la sostenibilidad, para fortalecer de nuevo la industria, entre los que se destacan productos como máscaras para pestañas, delineadores y esmaltes de uñas.
Asimismo, la compañía ha logrado consolidarse como actor estratégico en la región y ser referente en el mercado colombiano a través de marcas como Vogue (#1 en Colombia) y Maybelline (la más venida a nivel mundial) producidas en su planta ubicada en el municipio de Funza Cundinamarca, con la que ha logrado exportar a 13 países de Latinoamérica y hacia Estados Unidos.
De acuerdo con Guido Cerveira, Director de la planta de L’Oreál en Funza, esta planta hace parte de los esfuerzos de la compañía por contribuir en la reactivación a la generación de empleo, donde a la fecha cuenta con 532 colaboradores (403 mujeres y 129 hombres) y por fomentar la sostenibilidad, debido a que cuenta con la certificación de Carbono Neutro gracias a que el 100% de la energía usada proviene de fuentes renovables.
Labor que se suma a iniciativas como L’Oreál por el futuro que busca fomentar iniciativas de preservación del medio ambiente, apoyo a mujeres vulnerables y economía circular; Belleza por un futuro, que consiste en mejorar la calidad de vida de las mujeres a través de la capacitación técnica, con la que desde 2009 ha logrado impactar a más de 2.500 mujeres y que espera en 2022 llegar a más de 600 a través de su alianza con el SENA; y del programa Para las mujeres en la ciencia, que comenzó en 2009 y en alianza con el Ministerio de Ciencia y el ICETEX ha reconocido y financiado a 51 mujeres que participan en estudios científicos posdoctorales.