Uno de los grandes dinamizadores de la economía del país, sin duda, es el turismo, que antes de la pandemia aportaba el 2,8% al PIB nacional y que con el proceso gradual de reactivación espera recuperarse de los efectos derivados de los continuos períodos de confinamiento. Por eso La Nota Económica habló con Víctor Manuel Alvarado, gerente de Alojamiento de Compensar, para conocer su perspectiva frente a este proceso y los desafíos que enfrenta el sector.
Tras la reapertura gradual ¿Cómo se ha dado la reactivación del turismo en el país? (uno de los sectores más afectados por la pandemia del COVID-19)
El turismo se está reactivando de una manera escalonada, paulatina y por supuesto, positiva. Todos estamos con la intención de viajar de nuevo a los destinos conocidos, tradicionales y donde se garanticen los debidos protocolos de bioseguridad para sentirnos protegidos.
En la medida en que pase el tiempo vamos a volver a los destinos menos tradicionales que se estaban desarrollando en nuestro país y llegaremos a la normalidad que esperamos, es decir, en este momento se está impulsando el turismo a lugares cercanos a la ciudad, donde se pueda viajar fácilmente, incluso empleando nuestro vehículo propio, y probablemente entre más tiempo pase se llegará a otros destinos y se buscarán nuevos lugares que aunque ya se venían impulsando en el país, por causa de la pandemia se vieron frenados.
¿De qué manera el turismo ha contribuido a la reactivación de la economía?
El turismo es una de las mejores fuentes para desarrollar rápidamente la economía en un lugar, por la cantidad de actores que pueden participar y por los recursos que pueden dejar los turistas que entran a la región. Factores como la alimentación, transporte, logística, parques, hoteles, son generadores de empleo y ayudan a la reactivación total de una zona. En Colombia, el ejemplo más claro es el desarrollo que ha tenido el Eje Cafetero, gracias a la fuerza turística que tiene en este momento, pero así mismo, se pueden contar muchas otras ciudades que dependen exclusivamente de esta actividad. En el turismo somos dinamizadores de la economía, generadores de empleo y eso ayuda a reactivar rápidamente las zonas, generando bienestar integral en la comunidad.
¿Qué actividades ha implementado Compensar para incentivar el turismo en el país?
Particularmente en nuestros hoteles Lagomar y Lagosol hemos venido dándole foco a la bioseguridad, para garantizar que tanto nuestros colaboradores como nuestros visitantes tengan el mínimo riesgo posible en todo lo relacionado con la pandemia. De igual modo, nos certificamos con el sello Juntos Contra el COVID, en conjunto con Cotelco y seguimos fortaleciendo procedimientos y formas para hacer lo que ya hacíamos antes, pero ahora incluyendo la bioseguridad, garantizando que las personas que nos visiten disfruten de su estadía con todas las atracciones y actividades que tenemos, pero que adicionalmente se sientan protegidas.
Además, consideramos que el estar seguros es un compromiso entre el hotel y el turista, porque el distanciamiento social, el uso del tapabocas y el lavado frecuente de manos, son medidas propias del visitante, pero por supuesto, nosotros habilitamos zonas para contribuir en el cumplimiento de esas medidas como la demarcación de distanciamiento y los aforos limitados en comedores y piscinas. Por otro lado, al interior de los hoteles, se llevan a cabo medidas higiénicas específicas bajo unos parámetros de limpieza mucho más estrictos, acordes a las nuevas necesidades.
Supimos que recientemente Lagomar El Peñón, uno de sus hoteles, tuvo una remodelación. ¿En qué consisten esos cambios y cuál es el impacto que genera en la región?
Conscientes de que el descanso es esencial para el bienestar integral de las personas y con fin de brindar más alternativas para nuestros huéspedes, hicimos una intervención muy grande en Lagomar. Teníamos antes una oferta de 170 habitaciones y pasamos a 240, construimos una piscina semiolímpica, para un total de 4 piscinas, y un parque acuático para niños; instalamos tres toboganes, una zona para niños de 0 a 4 años y otra para niños de 4 a 10, complementando la oferta que teníamos con la zona de juegos electrónicos, la bolera, las zonas deportivas, el golfito, las canchas de tenis, de baloncesto, y de minifútbol sintético.
Asimismo, creamos una sala de lectura para adultos, otro restaurante a mantel, el cual se puede utilizar mediante inscripción y habilitamos una zona de terraza para actividades nocturnas. De esa manera, completamos en Lagomar una oferta para todos los miembros de la familia, para todos los gustos y edades, con la intención de que los visitantes quieran pasar más tiempo en nuestras instalaciones.
Gracias a este rediseño generamos más de 100 puestos de trabajo para personas que estuvieron dedicadas exclusivamente a la obra; y adicional, para la operación y atención a nuestros usuarios, creamos 30 más, pasando de 170 a 200 colaboradores, sin mencionar la parte administrativa, y esperamos llegar a los 225 en las temporadas altas.
Compensar se ha caracterizado por impulsar el turismo para las familias de menos recursos, ¿Cómo vienen fortaleciendo ese enfoque social?
En general las cajas de compensación prestamos el servicio no solo a los afiliados, sino también a los no afiliados, la diferencia radica en que los primeros tienen unas tarifas subsidiadas al momento de visitar nuestros hoteles. En el caso puntual de Compensar, el 72% de nuestros usuarios de servicios de alojamiento pertenecen a las categorías A y B de afiliación, es decir, personas con ingresos que van desde 1 hasta 4 salarios MMLV. Además, la estrategia que hemos implementado para hacer que más personas accedan al descanso y el esparcimiento, es el pasadía para Lagosol, otro de nuestros hoteles; con este paquete garantizamos una oferta muy completa, que a partir de $25.500 incluye: servicio de transporte ida y vuelta desde Bogotá, alimentación, piscina y actividades recreativas.
Por otra parte, para darles más opciones a las familias que visiten Lagosol, iniciamos la construcción de la primera fase de nuestro parque acuático, que impulsará otras actividades relacionadas con el turismo de la región y generará más empleo.
Regresar a labores cotidianas tras un año en el que el confinamiento y el aislamiento social fueron protagonistas ha generado un estrés en la sociedad ¿Qué importancia tiene el descanso en el bienestar integral de las personas?
Con la pandemia nos dimos cuenta de que podíamos trabajar desde lugares diferentes a nuestro sitio habitual; lo que hizo que a nuestros hoteles vinieran muchas personas a visitarnos, mientras trabajan o estudian.
De igual modo, el turismo en general cambió y con ello nuestras actividades. Antes, para tomar una decisión la gente buscaba un sitio con buena infraestructura, con precios que se ajustaran a su presupuesto y que ofrecieran un servicio espectacular, esos eran los tres primeros factores que consideraban, sin embargo, ahora hay que agregar un cuarto componente que se volvió real: la bioseguridad.
También se hizo evidente para la mayoría de las personas el valor que tiene el descanso; necesitamos salir de la rutina, nos hace falta el aire puro, ir de vacaciones, un cambio de escenario, factores en los que Compensar sigue creyendo y por los que fomenta diversas actividades para todas las edades, teniendo en cuenta que cuando hablamos de bienestar integral nos referimos a la suma de elementos que pueden fomentar el equilibrio entre lo físico, mental y espiritual y definitivamente el turismo contribuye de manera significativa a este balance.
Acá hay un mensaje clave y es que, aunque son importantes la parte económica y la parte física, también lo es la salud mental.
¿Qué retos considera deben enfrentar los actores del sector para que la actividad continúe en su senda de crecimiento?
Teniendo en cuenta la importancia que tiene el turismo a nivel económico y social, el reto más importante en el que debemos trabajar en Colombia es la formalización. Desde las gobernaciones, alcaldías y desde todos los actores que trabajamos en el turismo debemos impulsar ese tema para garantizarle al turista calidad y seguridad. Mientras continuemos con los niveles de informalidad a nivel turístico es muy difícil que logremos alcanzar la excelencia.
En ese sentido, de manera general, el reto está en esa formalización de todos los actores que participan en el turismo, y de manera particular hay dos grandes desafíos: el primero tiene que ver con la bioseguridad y el cumplimiento de protocolos y, el segundo, enfocado en un excelente servicio al cliente que, a la larga, es el que nos diferencia con otros destinos turísticos a nivel mundial. Razón por la que es necesario generar capacitaciones de forma permanente para mejorar el componente de servicio y hacer que nuestros huéspedes vivan experiencias memorables. Algo que en Compensar hemos hecho y seguiremos haciendo, fieles a nuestro lema institucional, lo mejor de lo que hacemos es para quien lo hacemos.
