IWG lidera la transformación del espacio laboral, apostando por entornos estratégicos que se adaptan a nuevas formas de trabajar y colaborar.
En el contexto económico actual y desafiante, el trabajo híbrido ha pasado de ser una tendencia a consolidarse como una decisión empresarial estratégica que impulsa el crecimiento, optimiza recursos y fortalece la retención del talento.
Según el Global Business Confidence Research de IWG, el 75 % de las empresas que ofrecen trabajo híbrido proyecta crecimiento en la segunda mitad de 2025, frente al 58 % de aquellas que mantienen esquemas tradicionales. Además, el 79 % ha logrado reducir costos operativos, optimizando sus esquemas inmobiliarios y logísticos.
Esta visión está respaldada por investigaciones de Nick Bloom, economista de Stanford, quien afirma que el trabajo híbrido representa una nueva normalidad. Su estudio con 1.600 empleados de Trip.com evidenció que este modelo puede reducir la rotación de personal hasta en un 35 %, sin afectar la productividad y con beneficios económicos tangibles.
Estudios recientes complementan este panorama. Según Barron’s (2024), el 30 % de los empleados ya trabaja bajo esquemas híbridos y un 10 % completamente remoto, con muchos dispuestos a aceptar hasta un 8 % menos de salario a cambio de flexibilidad. El Financial Times (2025) destaca que las culturas laborales híbridas actuales se fundamentan en la confianza, el bienestar y la informalidad.
En América Latina, muchas empresas globales están reconfigurando sus espacios hacia esquemas satelitales o mixtos, abriendo oportunidades para operadores de espacios flexibles en ciudades secundarias y zonas suburbanas.
En este contexto, Álvaro Rocafort, Country Manager de IWG en Colombia, asegura
“El trabajo ya no se mide en metros cuadrados, se mide en impacto.”
En Colombia, la evolución del modelo también se refleja en la expansión de los espacios flexibles. De acuerdo con JLL, estos representaban el 33 % del portafolio empresarial en 2023 y se proyecta que alcancen el 44 % para 2030. IWG lidera este cambio con más de 25 locaciones activas en ciudades como Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga y Pereira, y una ocupación promedio cercana al 90 %.
“La flexibilidad no es solo una respuesta a la coyuntura: es una decisión estratégica que transforma cómo, dónde y con quién se trabaja,” afirma Álvaro Rocafort, Country Manager de IWG en Colombia.
Su visión se traduce en acción. “Estamos acompañando a las empresas a repensar sus espacios de forma estratégica, diseñando entornos que respondan a nuevas formas de colaborar, crecer y liderar en este nuevo ciclo laboral,” puntualiza Rocafort.
Con cifras, enfoque organizacional y expansión territorial, IWG se consolida como el aliado clave en la transición hacia una nueva forma de trabajar: más eficiente, humana y adaptada a las demandas del presente y el futuro.
Datos clave
- El modelo híbrido cuenta con respaldo normativo en Colombia desde 2023, con avances proyectados para 2025.
- Su adopción también responde a una demanda generacional: el 75 % de los Millennials y Gen Z prefieren esquemas flexibles, lo que acelera su consolidación como formato organizacional vigente, competitivo y alineado con las nuevas culturas laborales.
