Si bien 2020 será recordado por la pérdida masiva de empleos en todo el mundo, en el último mes del año los datos muestran que, al menos en los países que forman parte de la OCDE, la tasa de desempleo se estabiliza ubicándose en el 6,9 %.
Este dato de diciembre se ubicó 1,7 puntos porcentuales por debajo del nivel de febrero del mismo año, el cual fue el último mes antes de que los efectos de la pandemia impactaran fuertemente la economía mundial.
En la Zona Euro el desempleo se ubicó en el 8,3 %, esto es 1,1 puntos porcentuales menos que en febrero. En cuanto a EE.UU., la principal economía mundial exhibió una tasa de paro de 6,3 % al cierre del año, aumentando 3,2 puntos porcentuales respecto al mes previo a la agudización de la contingencia sanitaria. Japón por su parte, se mantuvo estable en el 2,9 %, y bajó tan sólo medio punto porcentual.
Si bien los datos muestran una tendencia a la estabilización, cabe resaltar que la tasa de desempleo juvenil fue ligeramente superior en los miembros de la OCDE, al situarse en el 14,4 % frente al 14,2 % de noviembre. En cuanto a la Zona Euro, el bloque vio aumentar este indicador del 18,1 % al 18,5 %.
La tendencia parece alentadora, sin embargo la OCDE recalca que dichas estas estadísticas no recogen todo el desempleo causado por la pandemia, pues algunas personas sin empleo pueden contabilizarse como fuera de la población activa, pues no pudieron buscar trabajo activamente dadas las condiciones. Por esta razón la cifra real podría ser más alta a la reportada.